Yo soy un pollo joven, tengo catorce meses y vivo con mi mamá gallina y mi papá gallo. Soy un excelente estudiante mis amigos pollos son juiciosos como yo soy o como lo era.
Resulta que un día conocí un gallo de pelea y hice amistad con él, pasábamos la mayoría del día juntos pero empecé a bajar mis calificaciones y ser rebelde. Mi mamá me decía "deja esas malas amistades que no te van a llevar a nada bueno, recuerda que tienes buenos amigos que te quieren mucho y no te defraudan". Yo muy testarudo, no le hacía caso y me iba para donde el gallo de pelea, un día él me dijo vamos a robar el maíz que está en esa finca, yo muy asustado por la propuesta le dije que no, que soy un pollo honrado y con muchos valores, entonces mi supuesto amigo me dijo que dejara de ser miedoso y que ya no quería ser mi compañero.
Yo me fui muy triste, pero me di cuenta que los amigos que tenía si son verdaderos y que no me llevan por malos caminos. Le conté a mis padres lo que había pasado y me dijeron espero que hallas aprendido la lesion.
ESCUCHA SIEMPRE LO QUE TUS PADRES TE ACONSEJAN, ELLOS SIEMPRE TENDRAN LA RAZÓN.
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